Son emprendedoras y crearon una crema vegana con la que facturan $ 25 millones al mes


Son emprendedoras y crearon una crema vegana con la que facturan $ 25 millones al mes

En plena pandemia, las emprendedoras Valentina De Volder y Miriam Aberle decidieron transformar su pasión por la alimentación saludable en Ancestral, una empresa productora y comercializadora de pastas untables elaboradas 100% con frutos secos. Arrancaron con un robot de cocina desde sus casas y hoy le venden a todo el país, son proveedoras de reconocidas cadenas gastronómicas y están próximas a exportar.

De Volder, licenciada en Administración de Empresas, y Aberle, licenciada en Recursos Humanos, se conocieron de modo virtual en el contexto del confinamiento. Valentina, que aprovechó su tiempo libre para promover la alimentación saludable en redes sociales, se había convertido en una especie de influencer ¨healthy¨. Por su parte, Miriam estaba buscando cambiar sus hábitos alimenticios y, por recomendación de su hermano, se puso en contacto con Valentina en búsqueda de consejos. Las charlas online se convirtieron en la semilla de Ancestral, un emprendimiento que surgió de la necesidad de ofrecer opciones de untables saludables y naturales, sin ingredientes ultraprocesados.

Ambas jóvenes venían de trabajar en corporaciones, pero la incomodidad de De Volder con su empleo y la curiosidad de Aberle sobre alimentación las llevaron a unir fuerzas. Al comienzo intentaron vender harinas de frutos secos, pero no satisfechas, fueron, por más, con un producto con valor agregado y que en Argentina no existía: las pastas o mantequillas untables de frutos secos.

Sin renunciar a sus trabajos, invirtieron u$s 2.000 en un robot de cocina y con muchas ganas de innovar, comenzaron a experimentar con recetas en plena cuarentena. Cuando finalmente dieron con los sabores ideales, en septiembre del 2020, lanzaron sus productos a través de redes sociales, obteniendo una respuesta más que positiva. ¨Durante el proceso además nos fuimos dando cuenta de otros atributos del producto como que no necesita refrigeración, que es un único ingrediente y que es apto celíaco y vegano¨, cuenta Aberle. La oferta inicial de Ancestral incluía pastas untables de maní y almendras con coco, de Nueces Pecan y avellanas. Hoy tienen también de pistachos, de Castañas de Cajú y de almendras, todas en diferentes tamaños y 100% naturales.

La primera en renunciar a su trabajo en relación de dependencia fue Valentina, que lo hizo a los seis meses de fundar Ancestral y Aberle, al año. ¨No pudimos vivir de Ancestral hasta dos años después porque fuimos reinvirtiendo todo lo que ingresaba¨, cuenta Valentina.

Profesionalización y expansión del negocio

El éxito impulsó a las emprendedoras a renunciar a sus trabajos y a profesionalizar el emprendimiento, por lo que decidieron tercerizar la producción para ellas poder centrarse en la estrategia del negocio y en el desarrollo de los canales de comercialización. Primero, le pasaron la posta de la elaboración a la ex suegra de una de ellas que tenía ganas y tiempo para ocuparse, pero poco después, las socias entendiendo que si querían dar un salto debían certificar el producto y para ello debían industrializarse por lo que finalmente tercerizaron la producción con una fábrica en Luján, logrando no solo conseguir el Registro Nacional de Productos Alimenticios (RNPA), el sello sin gluten y apto Kosher, sino también un importante crecimiento: pasaron de elaborar 200 potes mensuales a un batch de 3.000. Allí estuvieron un año, luego mudaron la producción a una planta más grande de Villa Maipú (San Martín, Provincia de Buenos Aires) y hoy producen unos 3.500 kilos de pasta por mes.

¨Nuestro objetivo es que Ancestral pueda estar cada vez en más mesas y para eso hay que trabajar mucho en la estructura de costos, no queremos que el producto sea tan de nicho. Es un desafío enorme porque el producto es premium gourmet y la materia prima también es cara¨, señala Miriam.

En este sentido, agrega su socia, la apuesta es alcanzar volúmenes de venta que les permita mejores negociaciones con sus proveedores, sin tener que resignar rentabilidad y mantener precios accesibles.

La diversificación de productos también fue clave en su desarrollo, siempre están buscando qué más sumarle a su oferta. Como su último lanzamiento, Noccella, una pasta untable vegana de 70% avellanas con una mínima cantidad de azúcar, ideal para quienes desean disfrutar de algo dulce sin recurrir a productos ultraprocesados. ¨Con Ancestral, ser dulcero no significa comer mal¨, afirman sus creadoras, destacando que sus productos están hechos con ingredientes reales.

Este lanzamiento permite a Ancestral captar un nuevo público y proyectar un crecimiento del 20% en ventas para los próximos meses. Con una visión clara de convertirse en una marca de golosinas saludables, las socias ya tienen en carpeta el lanzamiento de bombones y una línea de alfajores. Si todo sale según lo planeado, estos nuevos productos estarán disponibles para febrero del próximo año.

Los productos de Ancestral no solo se encuentran en dietéticas supermercados, sino también en su propia tienda online. Además, lograron posicionarse en el sector gastronómico, siendo proveedores de importantes cadenas como Café Martínez y Tostado.

¨Creemos que ya para el año que viene comenzaremos a exportar. Venimos trabajando en eso con un programa de la Cámara de Comercio Exterior y avanzamos firmemente. Todavía no tenemos muy claro a qué destino, pero me animo a decir algo a Uruguay y Europa¨, adelanta Aberle.

Con una apuesta firme por la alimentación saludable, con las pastas untables, Ancestral factura alrededor de $ 25.000.000 por mes y sigue consolidándose en el mercado, poniendo el foco en los amantes de lo dulce que quieren comer y cuidarse.

Fuente: iprofesional.com

Previous Salud inauguró espacios para la formación académica de Residentes
Next ¨Justicia 1.0¨: mientras los ciberdelitos se multiplican, las causas tardan meses en avanzar